Juego con las letras

Imitando a Millás

por 

Alexis Canto

1º C

Entré en el diccionario, y pasé mi dedo por la"r". Radio, raro, rato... Me detuve un tiempo en rato, como el pequeño rato que pagaría por estar contigo una última vez... Después, volví hacia atrás, hacia la "c". Cenar, comer, cantar... Me detuve ahí otra vez, y recordé las canciones que me cantabas cuando era un renacuajo... Adelanté más páginas. Y caí en tiempo, y pensé en todo el hermoso tiempo que pasaba contigo... Y antes de cerrar el diccionario, viajé hasta la "c" y dirás, ¿otra vez en la "c"? Y digo yo; es que vengo a buscar el cariño que le tenía a mi abuela.

Semana del terror

LA CASA DE REPOSO

La madre superiora miró hacia el cielo como buscando una señal divina, y en sus ojos desvelados de oraciones reverberó cristalina una lágrima.

–¿Y dice usted que el viejo profesor se niega a ir a misa, hermana?

–Así es, reverenda. Y maldice y ofende a María Santísima.

–No importa, hermana. Llévelo entonces a dar un paseo por el huerto.

–Sí, reverenda.

–Hermana…

–¿Sí, reverenda?

–Que parezca un accidente

Semana del terror

DÍA DE DIFUNTOS

Cuando llegué al tanatorio, encontré a mi madre enlutada en las escaleras.

–Pero mamá, tú estás muerta.

–Tú también, mi niño.

Y nos abrazamos desconsolados.

Planeta Lorca

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Didáctica de la poesía

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Rosalí y Federico

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Collage

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Monólogo

Ángela Márquez 

Nunca creí que me vería en esta situación; perdido y solo en un país
lejano al mío. El no entender lo que ocurre a mi alrededor y no saber
si volver a mi tierra y vivir en la miseria junto a los míos o
quedarme aquí... Solo y enviando ayuda para que sigan adelante.
Nunca creí que me vería así... ¿Cómo hemos llegado a esta situación?
¿Cómo hemos pasado de estar en la cumbre a estar en la miseria? ¿Cómo?
¿Cuándo?
¿Por qué ?

Monólogo

Sara Pérez 

Nunca creí que volvería ese horrible lugar, ese lugar que me traía tan malos recuerdos y lleno de gente hipócrita...
Me dirigía hacia un barrio donde me crie en la dolescencia, no sé si me recordarán.
Iba pasando el tiempo, las paradas y mis piernas no dejaban de temblar, pero miraba por el cristal del autobús y, parecía aquello tan cambiado que pensé que aquel no era mi destino.
Al llegar baje los escalones muy despacio, con miedo y con la mirada hacia el suelo mientras caminaba, cuando de repente me crucé con la mujer más preciosa que mis ojos podían ver. Su cara me era peculiar y en ese momento me habló.
– ¿Guillermo eres tú? - dijo con voz dulce.
Yo no tenía palabras, pero estaba segurísimo de que era ella mi querida y amada Valeria.

Monólogo

María Reyes 

Nunca creí que todo terminase así. Que cuando la viera no la conocería, que sería otra persona, extraña. Nunca creí que me ella me pudiera olvidar.
Deambulo en mi pensamiento, navegando en un mar de dudas... ¿Por qué? ¿Cómo? ¿En qué momento? ¿Qué me llevaría hasta ella? ¿Qué me separaría de ella? Fue el cruel destino, aquel que un día hizo que nos encontráramos y aquel que me dijo que a un gorrión no se puede encerrar en una jaula...

Monólogo

Manuel Rodriguez

Nunca creí que mi mejor amigo había revelado muchos secretos que había prometido fielmente guardar. Esta experiencia también me sirvió para anotar mis ideas sobre la amistad. Ahora todo el mundo te llama amigo por algún suceso insignificante que haya sucedido entre los dos, pero olvidan que la amistad es más que el trato superficial entre "tú" y "nosotros" y que consiste en procurar siempre el bien del otro. El verdadero amigo demuestra con un elogio salidos del corazón el orgullo que siente porque su otro amigo triunfe o simplemente que sea feliz. Visto desde el ángulo frívolo, un amigo siente una suave atracción por el otro sin que esto signifique nada más que quererlo como es y aún así ayudarlo a ser una persona mejor cada día. Un amigo no ve en ti la ropa que usas, ve las cualidades que vistes. Un amigo nunca critica, sólo recomienda.
Un verdadero amigo jamás te haría daño, ni aunque fuera "por tu propio bien". De hecho, preferiría morir antes que tocarte un solo pelo. Un amigo te extraña. Y lo más importante, un amigo jamás traiciona. Una vez aclarado esto me siento mucho mejor, sin embargo una pregunta quedó en el aire: ¿quién es tu verdadero amigo?.

Monólogo

Juan Manuel Bernal

Nunca creí que este momento fuese a llegar tan pronto. La verdad. ¡Ay! maldita verdad!
No sé lo que hacer... ¿Le pido al chófer que se pare o sigo hasta la siguiente parada? Bueno... Voy a seguir. ¡Más policías!  No, no, noooo...  Aquí va a acabar este sueño de ilusiones contaminadas. Aquí voy a acabar este camino de felicidad pero con momentos deleznables. No me iré sin antes luchar. Voy a cargar la pistola. Le voy a decir al chófer que pare el autobús. Aquí empieza la fiesta de despedida.  Adiós vida maldita y maravillosa al mismo tiempo. Veo  un policía, apunto y ...

Monólogo

Eva María Gracia

Nunca imagine que este momento fuera a llegar. Estaba allí, en esa parada de autobús, solo, esperándome a mí, o al menos eso veían mis ojos ya que no me permitían poner la vista sobre alguien más que no fuera él. En ese momento quedé paralizado no sabía si bajar del autobús o seguir con mi camino. Se me vinieron todos los recuerdos de mi dulce infancia a la cabeza , la cual había compartido con él en la casa de nuestro padre hasta que tuvimos que separarnos y me tuve que ir a vivir con mi madre. Esos recuerdos estaban llenos de melancolía. Recordé cómo jugábamos a los detectives por la casa y utilizábamos los calcetines sucios de papa como pruebas, o como jugábamos a los pistoleros en el parque de la plaza al anocher las tardes de verano. Todos esos bonitos recuerdos invadieron mi mente hasta que una voz desagradable me dijo:

-¿Señor va a bajar usted del autobús? ¡No tengo todo el día!

-Sí, sí - respondí de inmediato y me dispuse a bajar.

Bajé los escalones poco a poco mirando al suelo pero sabía que él iba  estar ahí esperándome y que no se había ido. Cuando subí la mirada , lo vi. Estaba ahí. En seguida lo reconocí; tenia esa gran cicatriz en la cara que se hizo al lanzarse desde lo más alto del columpio para huir de mi disparo imaginario. Me quedé mirándolo fijamente. Ninguno de los dos nos atrevíamos a decir ni media palabra hasta que de pronto dije:

-¿Hermano eres tú?

-Sí, hermano -respondió con una voz grave. Y en seguida corrió a abrazarme.

Nunca había tenido tantas ganas de abrazar a una persona y el volver a abrazarlo dependía de esa conversación que teníamos pendiente desde hace unos 30 años.  Todo estaba en manos de esa conversación...

Monólogo

Ángela Carbonelll

Nunca creí que iba a volver a ver aquel ser tan horrible. Impregnado en mí con ese perfume... Desde aquel día, sigue apareciendo en todos y cada uno de mis sueños. Deseo con todo mi ser que salga de mí.

Como si se hubiera adueñado de mi mente. Un demonio. Quizás un espíritu. Algo imposible de imaginar.

Creía que jamás se volvería a acercar a mí.  Al principio parecían imaginaciones mías, pero lo inexplicable se repite una y otra vez.

Monólogo

Beatriz Luna

“Realmente siempre supe que ese no era mi camino, que a donde yo me dirigía no era el camino correcto pero nunca quise aceptarlo. Duele darse cuenta de las cosas, aceptar que todo ha cambiado, que nada es como antes. Pero bueno, supongo que no todo está perdido, que donde se cierra una puerta seguramente se abra otra. La segunda que puede ser mucho mejor. Por eso quiero creer que sé salir de aquí, de esto que me encierra y me hace estar así. Sinceramente no sé cómo, pues siempre he creído una realidad que quedaba bastante lejos de ser cierta, aunque no estuvo mal pasar por esas emociones de felicidad, de ser insuperable a los demás y como siempre he dicho, diferente. No sé muy bien dónde me hallo en estos momentos, dónde queda esa parte de mí que me hace levantarme, supongo que lo que tengo que lograr es volver a tenerla y obteniendo eso, habré subido un peldaño más de esta agonía. Estos pensamientos poco a poco me van llevando lejos, a otra dimensión mucho más imaginada y, aunque soy consciente de ello, creo que es lo que me reconforta ahora mismo. No busco mucho más. Sólo tengo que saber qué camino tomar.”

Monólogo

Trinidad Sánchez

Nunca creí que después de varios años iba a volver a pisar mi tierra natal.  Han pasado muchos años desde entonces, la última vez que estuve, seria con solo siete años y ahora echo un hombre vuelvo a ella. Desde que me fui mi vida cambio mucho, a estar acostumbrado a una aldea cómo es esto me tuve que acostumbrar a la ciudad. Aunque no lo parezca el cambio con solo siete años, fue difícil ya que aquí tenía a mis amigos y sabía cómo manejarme por la zona. Mi primer día en la ciudad, no lo quiero ni recordar, bueno como soy una persona de contarlo todo pues te lo voy a contar, solo a ti. Todo empezó cuando llegue al cole, me miraban extraño, yo pensaba que era porque a no tener allí confianza me miraban de esa forma. Pero no, me miraban extraño porque pertenecía a una aldea. Cuando por primera vez pise la clase donde iba a estar las seis horas que me quedaban por delante, me sentí reprochado, ya que todos mis compañeros tenían pupitres compartidos y yo estaba solo en una esquina con miedo. Unas de mis compañera se acercó a mí y me pregunto ¿Si quería sentarme con ella?, yo como no sabía él porque se lo pregunte y ya con mucha amabilidad me contesto que era porque eran impar hasta hoy que he llegado yo. Para no dejarla sola y yo tener compañía me senté junto a ella. Estuvimos charlando hasta que entro en clase la profesora de lengua, era una mujer muy simpática, amable. Empezó a pasar lista, hasta que llego a mí y me pregunto porque me había cambiado de centro, yo muy triste le conteste que mis padres no se podían hacer cargo de mí y que a partir de ahora mis tutores serian mis abuelos maternos.  Ella me cambio de sitio, me puso en primera fila junto a su mesa. Me dio pena de mi compañera ya que había empezado a tener confianza con ella, pero la profesora a darse cuenta de que ella estaba sola, también la cambio y la puso a mi lado. Paso rápido la hora, tras dos horas después. Tocaba el recreo, yo a no tener amigos, me quede en la clase solo, y mi compañera de pupitre que se llamaba Ana María me dijo que me fuera con ella. Que íbamos a estar con sus amistades, así yo también podía pertenecer a ese grupo. Paso volando esa media hora, tocaba volver a clase. Pero esta vez lo hice de forma diferente, ya no la hice con miedo, si no con alegría porque de no conocer a nadie, gracias a Ana maría conocía a varios compañeros. Al terminar el día de hoy, me fui corriendo para  casa de mis abuelos donde me tendría que quedar el resto de mi vida a vivir. Cuando llegue a mi nuevo hogar, ya tenía el plato de comida en la mesa. Tras almorzar, me toco ir a las clases particulares para reforzar lo que hoy había dado en clase. Fueron mis dos peores horas de toda mi vida, porque como no tenía deberes la profesora me puso ejercicios que yo no entendía, me lo explico varias veces pero yo seguía sin entenderlo, es más me puso ejercicios para que lo hiciera en casa. Volví a casa, y mi abuela me tenía preparada la merienda, me quede toda la tarde encerrado, aunque la aldea no estaba muy lejos pero a mis abuelos le daba miedo que me pasara algo.  Me toco preparar la mochila del próximo día, la prepare, cene y me acosté. Aunque no lo parezca para mí fue un día muy duro. Durante varios días, mis profesores hablaban entre ellos sobre mí. Yo me sentía, observado. Un día mi tutora, me pregunto cómo llevaba el cambio y yo para no engañarla le dije que mal, porque ha sido un cambio muy brusco.

Monólogo

Sara Navarro

¨Nunca creí que semejante ilusión fuese realidad tras atisbar en este mundo algo tan irreal. Mis ojos creyeron de una vez la realidad de ver lo que mi mente pensaba que jamás existiría. Tenía  la esperanza de creerme que lo que estaban viendo mis ojos era realmente cierto. No estaba soñando. Me había asombrado tanto que empecé a pensar de una manera diferente, tan diferente que esto logró que tuviera un punto de vista desigual al de los demás. Pero todo me hizo sentir de una forma rara. Me sentía extraño,  especial... Como si solo yo pudiera entenderme. ¿Tendría lógica? El por qué tenía esa forma que me diferenciaba de los demás. Pero lo bueno de todo esto es que me sentía único...¨

Monólogo

   
    DAVID URIBE GONZÁLEZ

Mi nombre es Ana. Hoy 17 de Junio de 2014 acaba de morir mi madre, el único familiar y apoyo humano que me quedaba . Estoy destrozada y machacada por dentro , sin ningún motivo para seguir viviendo .
No quiero saber nada más de lo que me pueda recordar a mi madre.

He cogido este tren y no sé dónde me lleva. Solo pasan por mi mente recuerdos de mi madre; mi infancia , mis primeros pasos junto a ella , las discusiones … En fin , una vida que de un momento a otro y sin saber por qué desaparece dejando un dolor intenso.  Como el que yo siento ahora mismo .
Me dirijo a un lugar desconocido , con lo puesto de ropa ,  100 euros en el bolsillo y un móvil con un 5% de batería . Estoy dispuesta a empezar una nueva vida en otra ciudad y en otro entorno que no me recuerde a mi madre para nada .
Ya pasé eso con mi padre. Tenía 3 añitos y era muy chica , pero ahora con 19 años no estoy dispuesta a sufrir más .
Solo Dios sabe lo que me deparará el futuro ...

Monólogo

Isabel Rosúa Segovia

Nunca creí que esté viaje en un simple autobús me pudiera cambiar tanto la vida. Todos, cuando somos pequeños hemos tenido ese mejor amigo. Y entonces, pensamos que siempre estará a nuestro lado, pero las personas crecemos y las cosas van cambiando. Crecemos y llegamos a un momento en que decidimos lo que queremos hacer y perdemos las amistades para conocer a gente nueva. Nunca pensé que en esté viaje pudiera ver a mi mejor amigo de la infancia. Una lástima que no pueda hablar con él; tengo tanto que agradecerle en esta vida.  Si él no hubiera estado en mi vida posiblemente ahora no esté aquí o tal vez sí ¿quién sabe? Ahora mismo me levantaría de este autobús. Iría al chofer y le diría que parara el autobús. Tan solo para saludar a esa persona que en un pasado fue mi mejor amigo, pero no lo haré. Nunca antes me había parado a pensar en lo importante que a sido ese amigo mío para mí en mi infancia. Todos los recuerdos me han venido juntos a la mente, cuando jugábamos en el parque, cuando fuimos a la playa juntos, cuando aprendimos a montar en bici. Incluso  cuando aprendimos a resolver la primera ecuación matemática. Todos esos recuerdos valen la pena. Este viaje me ha cambiado la vida. Me alegro de haberme subido a este autobús...

Monólogo

José Miguel Geniz 

Nunca creí que llegaría a este punto, en el que "el todo, ya no vale nada". Ese momento en el que me sentara a mirar cómo pasa el tiempo. ¡A cómo pasa la vida! ¿Y yo?  Yo sigo igual. Mi rutina no es ni mucho menos diferente a lo que yo esperaba. Sinceramente: me levanto, y me voy al trabajo, no vuelvo a casa hasta las diez de la noche.  Cojo este autobús y pienso. Pienso en lo que estoy haciendo con mi vida, si me compensa o no. Y la verdad es que no. Que aunque la vida sea dura, tengo que aprovecharla que solo tengo una y no es para siempre. 

Monólogo

David Peta

Nunca creí que que volvería a este lugar. Un lugar en el que sólo hay dos leyes  la ley del  más fuerte y la ley de la calle. 
Pensé que ya no volvería jamás ya que me esforcé en salir de allí y olvidarme de su existencia y sus habitantes. Pero,  claro jamás pude, ni podré olvidarme de  este lugar ya que lo más parecido a la ley es mi padre. Mi padre es uno de los jefes de la mafia o,  al menos lo era.
Con su muerte tengo que ir a ocupar su lugar o los demás bandos mafiosos atacarán a mi familia y amigos. Después de tanta lucha  por escapar de esta vida, no me queda más remedio que hacerla parte de mí.  Otra vez...

Monólogo

Santiago Castaño

Nunca creí que las personas llegarían hasta tal punto... mis ojos no daban a crédito cuando vi aquella situación, al mirar curiosamente al callejón que esta al lado de la puerta del cine, vi como dos hombres cogian a una anciana por los hombros y creo que estaban robándole. La metieron en una cochera y dió la casualidad que había una parada justo en la puerta del cine. No sabía que hacer, pero no podía quedarme sin hacer nada porque mi conciencia no estaría tranquila asique llamé a la policía y espere hasta que llegaron despues de unos 10 minutos. Me dieron un chaleco antibalas y me pidieron que les contara lo que había pasado y en qué cochera estaban. Se lo expliqué todo al mínimo detalle. Llegaron refuerzos con el mazo para derribar las puertas, la echaron abajo y nada mas entrar, estaba la señora tumbada en una cama viendo la tele y a los dos hombres, uno limpiando y otro haciendo de comer. A la anciana casi le da un infarto, todo resultó ser un malentendido, pues eran sus hijos que estaban ayudándola a subir las escaleras de la entrada de la cochera.

Monólogo

Ygritte Dondarrion
Ana Belén Arenas

Nunca creí que quedase algo de eso en este mundo. Ya tengo 40 años, viejo para algunos, joven para otros. Y durante mi experiencia en la vida he visto cómo el mundo se podría ante mis ojos. Personas que no piensan en otras, egoístas, crueles, sanguinarias, atroces, y tantos otros adjetivos. Supongo que por eso elegí mi profesión. Durante los últimos años me he dado cuenta más que nunca de que por cada acto de bondad hay diez de malicia. Y eso me entristece. Supongo que es un pensamiento pesimista. He llegado a pensar que ya no quedaba nadie en el mundo con un corazón totalmente puro. Ni siquiera yo mismo. Hasta que lo vi. La conocía. Solo había una persona en el mundo con esos ojos. Soy amigo de su padre. Paseaba por la calle despreocupada y feliz, agarrada a su tía, solo tenia seis años. La he visto en un par de ocasiones anteriores, no hay lugar para la tristeza o el odio en su corazón, aunque tenga motivos sobrados para llorar o enfurecerse nunca lo hace. Lleva toda su corta vida sin apenas ver a sus padres. A él no lo conocía. En cambio a sus padres sí los había visto. Un piloto y una azafata, debe verles poco. Pobre niño. Debe tener la misma edad. Ahí estaban los dos paseando. Ella agarrada a la mano de su tía con una sonrisa, y el de la de sus padres. Iban por distintos lados de la misma calle. El chico parecía contento debía ser uno de los pocos días que los veía. Todo estaba en calma, hasta que soltó la mano de sus padres. Riendo  corrió tratando de cruzar la calle, hasta que un coche apareció de la nada. La niña soltó la mano de su tía y se abalanzó sobre él para tratar de salvarle. No se conocían. Nunca se habían visto o hablado antes. Y trató de salvarle la vida incluso a riesgo de costarle la suya propia. Y así  lo hizo lo salvo. Parece que estaba equivocado.  No hay lugar en el mundo con más pureza y bondad que el corazón de un niño.  

El autorretrato de Miguel de Cervantes

#cymera

Monólogo

MARTA ALMANZA CLAVIJO 4ºB

Nunca creí lo que presencié con mis propios ojos en ese mismo instante. Nada más horrible, cruel y miserable...
Fui testigo de una de las escenas más duras y trágicas de mi vida. ¿Como puede haber personas así en pleno siglo 21?
Me avergüenza que haya personas tan necias y cobardes para maltratar a una mujer, y más aún de las personas que estaban presentes y no reaccionaron ante este hecho...
Piensa que esa mujer puede ser tu hermana, amiga, prima, tu tía o incluso podría ser tu madre... Y dime, en esta situación... ¿Actuarías de la misma manera?

Esta es la imagen vista desde mi ventana...

CALIGRAMAS

Primavera y poesía

Alberti en primavera

El diálogo de amor. Romeo y Julieta

Romeo y Julieta

Romeo: ¡Qué dolor tengo en el corazón! ¿qué rostro tan bonito? ¿es ese el resplandor que me conquistó? Sal hermosa luz, matas mis celos con tu dulce mirada de ojos brillosos y labios rojos, por eso tienes tanta clase, que bruto sería la persona que no sabe apreciarte, te llevo dentro de mí, ¿cómo decirte que sin ti yo no tendría vida? No halas pero tu rostro me basta.

Julieta: ¡Qué pena de mí!

Julieta: ¡Romeo! ¿Eres  tú  Romeo? ¿Por qué no cambias tu nombre? Si no puedes, quiereme, y yo cambiaré de nombre.

Julieta: Tú eres mi enemigo, tu familia es mi enemiga. La relación de nustros padres están rotas. ¿Por qué no cambias de nombre? Nada cambiaría en tí, segirías siendo tú mismo, pero con un nombre distinto. Tú conservarías tus virtudes y tus defectos los cuales no son heredados. Cambia tu nombre y te daré mi vida entera.

Romeo: ¡oh! Hablaste, tu rostro pálido y dulce lanza palabras hacia mi persona al fin, has salido tan bella como las estrellas que lucen en el firmamento.

Romeo: ¿Continuo hablando o hablo ahora?

Romeo: Razón tienes, porque solo yo puedo amarte como Dios a sus hijos.

El diálogo de amor. Romeo y Julieta

      ROMEO  Y  JULIETA .
Romeo : ¡Qué bien le sienta el dolor ajeno a quien nunca ha sentido dolor ! ¿ Pero que mujer se ve allí ? ¿ Si parece el sol al amanecer? Sal hermosa mujer y mata de envidia a todas las mujeres , que están furiosas y mosqueadas porque las has superado con su belleza . Brillas más que el sol . ¡Qué tonto el que intenta competir contigo ! ¡ Eres mi vida , eres mi amor! ¿ Cómo te puedo decir que me has conquistado el alma ? No me dices nada , pero no me importa , tus ojos hablan por ti . Las estrellas ruegan que las reemplacen durante tu ausencia . Si tus ojos fueran estrellas , tu luz sería suficiente para cubrir todo el planeta . ¿Quién te pudiera tocar como lo hace tu guante?
Julieta : ¡ Pobre de mí !
Romeo : ¡Habló ! Siento de nuevo su voz .
¡ Ángel de amores que te apareces por la noche como emisario de los cielos , que la gente te mira deslumbrados por tu belleza !
Julieta : ¡Romeo , Romeo ! ¿ Por qué eres tu Romeo ? ¿ Por qué no abandonas el nombre de tu familia ? Y si no tienes valor para eso quiéreme y yo no seré Capuleto .
Romeo : ¿ Qué hago , sigo escuchándola o hablo ?
Julieta : ¿ No eres a caso mi oponente ? , Montesco es tu nombre ,  ¿ Y que es Montesco?
No es mi cuerpo ¿ Por qué no coges otro nombre ? Los colores no dejaran de ser esos colores , ni perderían su olor aunque , tuvieran otro nombre . De tal forma aprecio a mi querido Romeo , aunque tuviera otro nombre , mantendría su magnífica cualidad de su alma , que le falta por herencia . Deja a tu familia Romeo y a cambio de tu persona , que no es necesario , coge toda mi alma .

El diálogo de amor. Romeo y Julieta

ROMEO Y JULIETA

ROMEO (Tania): Qué sencillo es burlarse de los demás, aquel que se ha mantenido apartado a los dolores. ¿Qué es aquello que ilumina el cielo? Será que se acerca el despertar del día?. No tardes en salir bella mujer, y cubre con el resplandor de tus rayos sin envidia a cualquier Miss. Debido a esto, el sol compite contigo. ¿Qué sudecerá cuando al amanecer del día le diga que es la mujer a la que realmente amo?. Ella quedará en silencio y serán sus ojos los que contesten por sí solos.¡Qué cosa la mía, si no me responderá! Las luces del cielo me supliran durante su ausencia. Si sus propios ojos fuesen astros en el cielo, serían los mejores. Si esto fuese real, seguro que el resplandor de dichos ojos sería tan fuerte que haría despertar a las aves antes del amanecer y estos cantarían hasta la presencia del alba.

JULIETA (Beatriz): ¡Qué pena!

ROMEO (Tania): Te escucho de nuevo como aquel ángel que aparece en mis sueños, quienes los de la muerte te observan cruzar con vuelo muy rápido y acomodarse sobre las nubles.

JULIETA (Beatriz): Romeo... ¿Por qué eres tú? Sé valiente y desaste de tus apellidos, ámame y yo me olvidaré de los míos

ROMEO (Tania): No sé si escucharte o hablar sobre mis pensamientos


JULIETA (Beatriz): Es tu apellido el que te pone en mi contra y no es que sea algo dificil de desahacer. ¿Por qué no lo cambias? Pese a ello todo seguiría igual; la rosa no tendría otro aroma aún cambiando de nombre. Así, mi Romeo, conservaría todas las cualidades propias de ella. Querido, deja tu nombre y por esto seré toda tuya.

Los Clásicos bajan a la calle. Ejemplo para Tercero

Jardín de Capuleto

(Romeo y Julieta)

Romeo: ¡Qué bien hace escarnio del dolor ajeno quien jamás ha sentido dolores ...! (Julieta frente a la ventana). ¿Pero qué luz se deja ver allí? ¿Es el sol que sale ya por los balcones de levante? Sal, hermoso sol, y mata de envidia con tus rayos a la luna, que está pálida y ojerosa porque vence tu hermosura cualquier ninfa de tu coro. Por esa razón viste de color amarillo. ¡Qué terco es quien se arree con sus galas marchitas! ¡Es mi vida, es amor el que aparece! ¿Cómo podría yo decirle que es señora de mi alma? Nada me dijo. Sin embargo ¿qué importa? Sus ojos hablarán, y yo contestaré. ¡No obstante qué atrevimiento el mío, si no me dijo nada! Los dos más bellos luminares del cielo le ruegan que los reemplace durante su ausencia. Si sus ojos relumbraran como astros en el cielo, su luz sería suficiente para ahogar los restantes como el fulgor del sol mata el de una antorcha. ¡Tal cascada de luz manaría de sus ojos, que haría despertar a las aves a medianoche, y corear su canción como si hubiese llegado el alba! Ahora coloca la mano en la mejilla. ¿Quién pudiera tocarla como el guante que la cubre?

Julieta: ¡Pobre de mí!

Romeo: ¡Habló! Siento de nuevo su voz. ¡Ángel de amores que en medio de la noche te me apareces, como emisario de los cielos a la asombrada vista de los mortales, que deslumbrados te observan cruzar con vuelo muy rápido las esferas, y mecerse en las alas de las nubes!

Julieta: ¡Romeo, Romeo! ¿Por qué eres tú Romeo? ¿Por qué no renuncias al nombre de tus padres? Y si careces de valor para tanto, ámame, y no me tendré por Capuleto.

Romeo: ¿Qué debo hacer, continúo escuchándola o hablo?

Julieta: Acaso no eres tú mi enemigo. Es el nombre de Montesco, que llevas. ¿Y qué quiere decir Montesco? No es pie ni mano ni brazo ni rostro ni fragmento de la naturaleza humana. ¿Por qué no tomas otro nombre? La rosa no dejaria de ser rosa, tampoco dejaria de esparcir su aroma, aunque se llamara de otra manera. Asimismo mi adorado Romeo, pese a que tuviera otro nombre, conservaria todas las buenas cualidades de su alma, que no las tiene por herencia. Deja tu nombre, Romeo, y a cambio de tu nombre que no es cosa esencial, toma toda mi alma.

El Bestiario

1. Dividimos la clase en grupos de 4, y cada alumno con un rol diferente.

2º Le damos las siguientes instrucciones:
Piensa en tres animales ( alumno 1). Piensa en una fruta (alumno 2). Piensa en una parte del cuerpo humano (alumno 3). Piensa en un color (alumno 4).Dejamos dos minutos para pensar y escribirlo en el cuaderno.

3º Ponemos para ello el cronómetro bomba en marcha, con 2 minutos de tiempo.
http://www.online-stopwatch.com/spanish/countdown- bomb.php

4º Ahora pensamos en ese animal fantástico juntando todas las características:.
Por ejemplo: un pato pequeño y redondo como la manzana, con cola de león y cuerpo de caballo de color azul.

5º  Volvemos a darles 3 minutos del cronómetro bomba.

6º Entre todos respondemos a las cualidades de ese animal fantástico:

¿Inteligencia? ¿De qué se alimenta? ¿su hábitat?¿Cómo se relaciona con los otros seres?
Obtenemos respuestas de todo tipo: inteligente/poco inteligente, mar/ fondo de un volcán, etc

7º Una vez más, cronómetro bomba dos minutos y ya tenemos el boceto con las descripciones.

8º Contabilizamos nuevamente dos minutos para pensar (individualmente) y escribir cada uno en su cuaderno, con una extensión aproximada de  1 -1,5 líneas.

Describe físicamente al animal fantástico (alumno 1). Explica su inteligencia justificándola (alumno 2). Relata ¿de qué se alimenta? (alumno 3). Explica ¿cómo se relaciona?(alumno 4)
9º Técnica del Folio Giratorio.
El alumno 1 escribe en una línea aproximadamente su descripción física, los compañeros ayudan al nº 2 a encontrar un nexo que sirva para unir con la explicación de la inteligencia, igualmente ayudan al nº 3 para encontrar el nexo con la alimentación y posteriormente con su relación con los otros seres.

10º Finalizamos con una lectura en alto y dibujamos "el animalito"

Esta práctica se puede repetir en otra ocasión para utilizar estos dos personajes en la realización de una Historia Fantástica muy disparatada.

Los Clásicos bajan a la calle. EJEMPLO PARA SEGUNDO

 El Autorretrato de Miguel de Cervantes

"Éste que veis aquí, de rostro aguileño, de cabello castaño, frente lisa y desembarazada, de alegres ojos y de nariz corva, aunque bien proporcionada; las barbas de plata, que no ha veinte años que fueron de oro, los bigotes grandes, la boca pequeña, los dientes ni menudos ni crecidos, porque no tiene sino seis, y ésos mal acondicionados y peor puestos, porque no tienen correspondencia los unos con los otros; el cuerpo entre dos extremos, ni grande, ni pequeño, la color viva, antes blanca que morena; algo cargado de espaldas, y no muy ligero de pies; éste digo que es el rostro del autor de La Galatea y de Don Quijote de la Mancha , y del que hizo el Viaje del Parnaso , a imitación del de César Caporal Perusino, y otras obras que andan por ahí descarriadas y, quizá, sin el nombre de su dueño. Llámase comúnmente Miguel de Cervantes Saavedra. Fue soldado muchos años, y cinco y medio cautivo, donde aprendió a tener paciencia en las adversidades. Perdió en la batalla naval de Lepanto la mano izquierda de un arcabuzazo, herida que, aunque parece fea, él la tiene por hermosa, por haberla cobrado en la más memorable y alta ocasión que vieron los pasados siglos, ni esperan ver los venideros, militando debajo de las vencedoras banderas del hijo del rayo de la guerra, Carlo Quinto, de felice memoria".

Novelas ejemplares

Don Quijote de la Mancha

Adrián Romero

En sitio de La Mancha,un nombre que no me acuerdo,no muy lejos tenía una escopeta,un porro,un caballo hecho una mierda y un perro de la ostia.Tenía una sartén gigante con filete de vaca y le gustaba curdo, unas migas para por la noche, varias comidas típicas de allí, los sábados lentejas comida de vieja, los viernes  y algo de comer los domingos. Gastaba más de la mitad de su money. Lo que le quedaba se lo gastaba en ropa, y los días entre semana en un banquete de pijos. Tenía una ama de casa de unos cuarenta tacos y, una sobrina con menos de veinte, un niño de campo que le ponía una sillita al caballo. El chaval no pasaba de los cuarenta. Era delgado, poco musculoso, madrugador y le gustaba la caza. Tenía varios nombre "Quijada" y "Quesada", algunas personas no pensaban lo mismo que otras, aunque son tonterías se llamaba "Quijada", pero esto no es importante en la historia: vale con que digan algo de verdad.

Don Quijote de La Mancha

Francisco Javier Ortega

En un sitio de la Mancha , que del nombre no me acuerdo , hace poco vivía un hombre con; una escopeta , una pistola y una navaja ... Llevaba un rottweiler .

En una olla había carne para almorzar . Para cenar había salpicón . Los viernes comían lentejas y alguna paloma los domingos ... Se gastaban casi todo el dinero en comida . El resto del dinero era parar vestirse con ropa elegante para las fiestas con unos zapatos también elegantes y los días entre semana se vestía normal .Tenia una mujer con mas de 40 años y una sobrina que no llegaba a 20 años . un amigo le ayudaba a cazar y a podar . El hombre tenia unos 50 años más o menos .Era tan delgado que hasta se le marcaban los huesos de la cara , muy madrugador y aficionado a la caza .

Dicen que se llamaba Quijada o Quesada ...Pero lo más evidente es que se llamase Quijana ,pero esto no importa mucho . No tienen que decir tantas mentiras la gente 

El autorretrato de Miguel de Cervantes

Juan José Vargas

Aquí estoy con la cara larga , de pelo castaño , frente lisa y plana , con unos ojos preciosos y con nariz de punta . Las barbas blancas como la tiza  y eso que hace unos años era rubio , los bigotes grandes y largos , la boca pequeña , los dientes regulín regula por que tengo seis y en mal estado. Mi cuerpo no es ni pequeño ni grande  , de color moreno , y un poco jorovado  y flaco de pies. Yo , sí fui el escritor de La Galatea, El Quijote y El Viaje al Parnaso. Me llamo Miguel de Cervantes Saavedra. He sido picoleto unos cuantos años y cinco y medio en la cárcel donde aprendí a tener paciencia. Perdí la mano izquierda en la batalla de Lepanto de un trabucazo. Una herida que parece fea. Pero para mí es como un trofeo.

El autorretrato de Miguel de Cervantes

Pedro Milans

Mira, tengo el pelo castaño, la frente lisa, unos ojos bonitos y una barba gris. Mis bigotes son grandes, aunque mi boca es pequeña, tengo los dientes normales y mi cuerpo también es normal, no soy ni bajo ni alto. Este soy yo, el escritor de La Galatea y Don Quijote de la Mancha. Fui soldado muchos años, y cinco y medio esclavo, y gracias a eso conseguí la paciencia que tengo hoy en día. Perdí la mano izquierda por culpa de un tiro, y aunque me digan que la herida es fea, a mí me gusta mucho, ya que me la hice en una batalla que será recordada en los tiempos que vienen.

Monólogos

El personaje ha visto algo o a alguien por la ventana del bus.  Escribe lo que piensa sobre lo que ha visto. Debe empezar con la expresión: "Nunca creí..." 

Monólogos

Realiza un monólogo donde reflejes los pensamientos del personaje del cuadro.

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Jóvenes escritores

Tachismo

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Un poema saca otro poema

Alejandra Pizarnik

Cansada del estruendo mágico de las vocales
Cansada de inquirir con los ojos elevados
Cansada de la espera del yo de paso
Cansada de aquel amor que no sucedió
Cansada de mis pies que sólo saben caminar
Cansada de la insidiosa fuga de preguntas
Cansada de dormir y de no poder mirarme
Cansada de abrir la boca y beber el viento
Cansada de sostener las mismas vísceras
Cansada del mar indiferente a mis angustias

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La creación del personaje

Un poema saca otro poema

Estados de Ánimo
Mario Benedetti

Un poema saca otro poema

Aquí está el texto con imágenes del autor

Un poema saca otro poema

Por mi parte, soy o creo ser duro de nariz,
mínimo de ojos, escaso de pelos
en la cabeza, creciente de abdómen,
largo de piernas, ancho de suelas,
amarillo de tez, generoso de amores,
imposible de cálculos,
confuso de palabras,
tierno de manos, lento de andar,
inoxidable de corazón,
aficionado a las estrellas, mareas,
maremotos, administrador de
escarabajos, caminante de arenas,
torpe de instituciones, chileno a perpetuidad,
amigo de mis amigos, mudo
de enemigos,
entrometido entre pájaros,
mal educado en casa,
tímido en los salones, arrepentido
sin objeto, horrendo administrador,
navegante de boca
y yerbatero de la tinta,
discreto entre los animales,
afortunado de nubarrones,
investigador en mercados, oscuro
en las bibliotecas,
melancólico en las cordilleras,
incansable en los bosques,
lentísimo de contestaciones,
ocurrente años después,
vulgar durante todo el año,
resplandeciente con mi
cuaderno, monumental de apetito,
tigre para dormir, sosegado
en la alegría, inspector del
cielo nocturno,
trabajador invisible,
desordenado, persistente, valiente
por necesidad, cobarde sin
pecado, soñoliento de vocación,
amable de mujeres,
activo por padecimiento,
poeta por maldición
y tonto de capirote.

Un poema saca otro poema

ESTADOS DE ÁNIMO

Unas veces me siento
como pobre colina
y otras como montaña
de cumbres repetidas.

Unas veces me siento
como un acantilado
y en otras como un cielo
azul pero lejano.

A veces uno es
manantial entre rocas
y otras veces un árbol
con las últimas hojas.
Pero hoy me siento apenas
como laguna insomne
con un embarcadero
ya sin embarcaciones
una laguna verde
inmóvil y paciente
conforme con sus algas
sus musgos y sus peces,
sereno en mi confianza
confiando en que una tarde
te acerques y te mires,
te mires al mirarme.

Los Clásicos bajan a la calle 2. .

ROMERO Y JULIETA

W. Shakespeare

Romeo: ¡Qué bien hace escarnio del dolor ajeno quien jamás ha sentido dolores ...! (Julieta frente a la ventana). ¿Pero qué luz se deja ver allí? ¿Es el sol que sale ya por los balcones de levante? Sal, hermoso sol, y mata de envidia con tus rayos a la luna, que está pálida y ojerosa porque vence tu hermosura cualquier ninfa de tu coro. Por esa razón viste de color amarillo. ¡Qué terco es quien se arree con sus galas marchitas! ¡Es mi vida, es amor el que aparece! ¿Cómo podría yo decirle que es señora de mi alma? Nada me dijo. Sin embargo ¿qué importa? Sus ojos hablarán, y yo contestaré. ¡No obstante qué atrevimiento el mío, si no me dijo nada! Los dos más bellos luminares del cielo le ruegan que los reemplace durante su ausencia. Si sus ojos relumbraran como astros en el cielo, su luz sería suficiente para ahogar los restantes como el fulgor del sol mata el de una antorcha. ¡Tal cascada de luz manaría de sus ojos, que haría despertar a las aves a medianoche, y corear su canción como si hubiese llegado el alba! Ahora coloca la mano en la mejilla. ¿Quién pudiera tocarla como el guante que la cubre?

Julieta: ¡Pobre de mí!

Romeo: ¡Habló! Siento de nuevo su voz. ¡Ángel de amores que en medio de la noche te me apareces, como emisario de los cielos a la asombrada vista de los mortales, que deslumbrados te observan cruzar con vuelo muy rápido las esferas, y mecerse en las alas de las nubes!

Julieta: ¡Romeo, Romeo! ¿Por qué eres tú Romeo? ¿Por qué no renuncias al nombre de tus padres? Y si careces de valor para tanto, ámame, y no me tendré por Capuleto.

Romeo: ¿Qué debo hacer, continúo escuchándola o hablo?

Julieta: Acaso no eres tú mi enemigo. Es el nombre de Montesco, que llevas. ¿Y qué quiere decir Montesco? No es pie ni mano ni brazo ni rostro ni fragmento de la naturaleza humana. ¿Por qué no tomas otro nombre? La rosa no dejaria de ser rosa, tampoco dejaria de esparcir su aroma, aunque se llamara de otra manera. Asimismo mi adorado Romeo, pese a que tuviera otro nombre, conservaria todas las buenas cualidades de su alma, que no las tiene por herencia. Deja tu nombre, Romeo, y a cambio de tu nombre que no es cosa esencial, toma toda mi alma.

los clásicos bajan a la calle. 3º

LOS CLÁSICOS BAJAN A LA CALLE


 El Autorretrato 
de
Miguel de Cervantes

"Éste que veis aquí, de rostro aguileño, de cabello castaño, frente lisa y desembarazada, de alegres ojos y de nariz corva, aunque bien proporcionada; las barbas de plata, que no ha veinte años que fueron de oro, los bigotes grandes, la boca pequeña, los dientes ni menudos ni crecidos, porque no tiene sino seis, y ésos mal acondicionados y peor puestos, porque no tienen correspondencia los unos con los otros; el cuerpo entre dos extremos, ni grande, ni pequeño, la color viva, antes blanca que morena; algo cargado de espaldas, y no muy ligero de pies; éste digo que es el rostro del autor de La Galatea y de Don Quijote de la Mancha , y del que hizo el Viaje del Parnaso , a imitación del de César Caporal Perusino, y otras obras que andan por ahí descarriadas y, quizá, sin el nombre de su dueño. Llámase comúnmente Miguel de Cervantes Saavedra. Fue soldado muchos años, y cinco y medio cautivo, donde aprendió a tener paciencia en las adversidades. Perdió en la batalla naval de Lepanto la mano izquierda de un arcabuzazo, herida que, aunque parece fea, él la tiene por hermosa, por haberla cobrado en la más memorable y alta ocasión que vieron los pasados siglos, ni esperan ver los venideros, militando debajo de las vencedoras banderas del hijo del rayo de la guerra, Carlo Quinto, de felice memoria".

Novelas ejemplares

El amor cortés. La carta

Raquel Melgar

Toledo, 10 de Enero de 1458

Leriano, querido:

Aquí me hallo hundida en la pena por tener que decirte estas palabras. Espero que sepas aceptarlo por más que duela.

Temo me que solo esto debe ser una amistad, no podemos ser más, ya que a mi parecer saldremos perjudicados ambos. No sería bien fingir algo que en verdad no siento. Lástima no decirlo ante ti porque parto a un largo viaje, mas lo siento en el alma ya que cuando regrese nada será lo mismo. Sé que por más que lo lamente nada puedo solucionar, y si por culpa mía fallecieses, vagaría como alma en pena ya que nada así pretendo. Dicho esto, espero volver a verte pronto. Intentemos sufrir lo menos posible y recuerda que siempre has sido y eres para mí una persona ejemplar.

Gracias, en verdad te lo digo, por todo.

Fdo: Laureola

JUAN JOSÉ PÉREZ

Toledo

Querido Leriano:  por fin he encontrado un hueco para escribirte esta carta que desde hace ya varias semanas te la quiero enviar. Desde que nos distanciamos no paro de pensar en ti, aunque el amor prófugo no es una opción te deseo la mayor de las suertes pero lo nuestro es un amor imposible Leriano. En esta carta te confieso mis sentimientos y como signo del cariño mutuo te envío esta carta para hacerte saber que nunca nos volveremos a ver. Mi familia me lo prohibió en todo momento pero que sepas que siempre te guardare con cariño esos encuentros furtivos y esa sonrisa tan bella que me provocaba la absorta mirada en ella.

 Espero que me recuerdes con cariño y no me guardes rencor.

CON CARIÑO LAUREOLA

P.D: SOLO LOS DOS SABEMOS LA FALTA QUE NOS HACEMOS.

Mª DOLORES PESO

Castilla, 9 de noviembre 1.450

Querido Leriano:

En el día de hoy me comunicó contigo a través de esta carta. Soy consciente de que no es lo más ideal, pero es la única manera que tengo de comunicarme, verte complicaría muchísimo las cosas. A través de este papel lo que quería comunicarte es que nuestro amor es algo imposible, jamás podríamos estar juntos por más que lo intentemos y la razón no es porque yo no quiera sencillamente es porque no puedo y voz lo sabe; sabe que yo estoy enamorada de otro hombre y que lo esperaré hasta el resto de mis días. Esta no es un fácil situación ni para mí, ni para ti; pues sé que mis palabras no te bastan para hacerte desistir y que un simple papel con unas cuantas letras no es suficiente para abrir tus ojos y que logres ver que toda esta historia es algo imposible, pues tu amor hacia mí es tan grande como la vida misma. Aun así, me quedo más tranquila concediéndote estas palabras, pues no sería justo no darte ninguna explicación ya que eres una gran persona que lo merece todo, me gustaría no hacerte este daño tan grande, pero no hay nada que pueda hacer al respecto. Para ti todo esto parecerá en un principio como una historia de terror, pero lo único que espero es que con sigas salir de esta dura cárcel de amor y encuentre a la dama perfecta para tu vida. Con gran cariño.

                                                                        Firmado: Laureola

DAVID URIBE

El Bosque , 10 de septiembre de 1492 .

  Hola Leriano , soy Laureola. Han llegado a mis oídos tu decisión de ni comer ni beber por la falta de mi amor .

Sé que es tu voluntad amarme y servirme pero ese amor no me corresponde . Estas llegando a la muerte y no lo quiero por que te tengo cariño , pero lo que tu alma desea  es imposible . Cuando termine esta carta se la daré a mi sirviente para que  la lleve a tus manos , Cuando termines de leerla , quiero que la guardes en algún sitio secreto , para que nadie más que tu y yo sepa el contenido   de esta carta , y que aunque esta historia no terminé como bien tu quieres ,  Estemos siempre comunicados .

Un saludo de Laureola .

LAUREOLA

BEATRIZ LUNA

                                                                                      Toledo, 28 de enero de 1463

Querido Leriano:                                                                                                           

amigo, ¿Cómo estás?, espero que no hayan cambiado las cosas y todo siga como hasta ahora. El motivo de escribirte esta carta me entristece porque he de decirte que no me gustaría causarte ningun daño más es verdad que no puedo forzar algo que no siento. Sé que no es lo que esperas y de corazón lo lamento, pero tengo que decirte que no siento ese amor que tú sientes hacia mí. Es cierto que aprecio mucho tu coraje y me alegra haber conocido a una persona llena de valores. Para mí siempre fuiste y serás, una de las personas más importantes que marcará en mi vida, más debo decirte que en eso se queda todo, en una bonita amistad. No me gustaría que me obligases a nada, pues dejaría de lado nuestra relación. Mañana me iré de viaje por un tiempo. Espero volver  pronto y reencontrarme contigo para que puedas contarme y pueda contarte las buenas nuevas que han ocurrido en la distancia. No lo pases mal por el contenido de esta carta ya que será un gran peso hacía mí, aunque sé que es inevitable. 

Gracias por todo, eres una gran persona. 

Con cariño.

                                                      

                                                           

Firmado: Laureola.

BELÉN PONCE

  Peñafiel,   27 de enero 1481

                  Mi querido Leriano:

Lo nuestro es un amor imposible. Mi padre me ha prometido a un noble de Francia y marchó mañana mismo; te  digo primero que mi amor será eterno hacia ti.  Nunca lo voy a amar como te amé a ti. Sé que pronto abandonarás esta vida.

No tardaremos mucho en estar juntos por la eternidad.

Tu amada Laureola

NAZARETH DELGADO

Toledo, 19-Septiembre-1380

Amado Leriano:

Me enteré de que estás enfermo y que la muerte te persigue. No puedo dejar que te vayas sin decirte que te amo desde la primera vez que te vi. Nunca me atreví a decirte mis enamorados pensamientos a causa de que mi familia no me deja que vaya a verte ya que tu familia como la mía están enfrentadas desde hace muchos años.

Solo decirte que me esperes en los cielos y que nunca podré enamorarme de nadie más. Tú sigues en mi cabeza para siempre .

Te envío tranquilidad para tu despedida.

                                                                                      Laureola

P.D: Estarás siempre en mi corazón